La actuación de mentoría social para jóvenes de Incorpora Joven une a Jaiza y María José

Jaiza Kaddouri, usuaria de Incorpora Joven; María José García, mentora de Jaiza; y Cristina Giraldo, técnica de Incorpora Joven, en Málaga Acoge.

Jaiza Kaddouri, una joven marroquí de 19 años, y María José García, psicóloga de 43 años, han creado un vínculo muy especial. ¿Cómo se conocieron y qué las ha llevado a ser un tándem perfecto? La actuación de mentoría social para jóvenes en riesgo de exclusión social enmarcado dentro de la línea joven del programa Incorpora, Incorpora Joven.

Este proyecto de mentoría social busca poner en contacto a jóvenes y personas voluntarias que les hagan de mentores y les acompañen en sus procesos de inserción sociolaboral. Los objetivos principales de esta actuación de acompañamiento son mejorar el desarrollo psicosocial y personal de jóvenes que no tienen referentes adultos o se encuentran en situación de vulnerabilidad y fomentar su participación comunitaria.

La mentoría como parte del itinerario de inserción sociolaboral de Jaiza

Jaiza empezó un itinerario sociolaboral asociado a un plan de trabajo en la entidad Málaga Acoge del Grupo Incorpora Andalucía. Su objetivo era encontrar un empleo y, con él, alcanzar su emancipación social y económica.

Dado que dejó los estudios a los catorce años, desde la entidad le propusieron empezar su itinerario completando su formación. Decidió apuntarse a los Puntos de Formación Incorpora (PFI) y finalizó un curso especializado en comercio, con el que amplió sus competencias técnicas, profesionales y transversales, las cuales le facilitarán el acceso a un puesto de trabajo.

La técnica Incorpora Cristina Giraldo le propuso a Jaiza que participara en el proyecto de mentoría social, y a la joven le pareció interesante: “Me gustó la idea de ver a una persona como a una amiga una vez a la semana, ya que no tengo amigas, y a veces me siento sola”, comenta.

La técnica pensó que la persona perfecta para ser la mentora de Jaiza era María José, quien había estudiado psicología y se había formado como mentora social porque quería dedicar su tiempo libre a hacer algo útil para las personas.

Y, así, se creó uno de los cuatro emparejamientos realizados este año por Málaga Acoge dentro del proyecto de mentoría social, que ha resultado ser todo un éxito para las dos partes implicadas.

El acompañamiento integral de los mentores a los jóvenes

Desde ese momento, Jaiza y María José se convirtieron en una muy buena pareja: pasean, intercambian recetas de cocina, conversan: “Nos vemos cada semana”, cuenta la mentora. “Un día acompañé a Jaiza al centro de salud, vimos las procesiones de Semana Santa, celebramos el fin del ayuno del Ramadán, paseamos por mercadillos mientras hablábamos, ¡que nos gusta mucho!”.

Además, Jaiza ha retomado recientemente sus estudios en el IES Vicente Espinel para conseguir la titulación de la ESO: “Me gusta estudiar Lengua e Historia”, afirma la joven. María José está siendo clave en este proceso, ya que le está dando apoyo con el inglés y le insiste en la importancia de seguir estudiando: “Siempre me aconseja. A veces pienso en dejar de estudiar cuando encuentre un trabajo, pero ella me dice que no debería. Y creo que tiene razón, ella mira por mi futuro”, apunta Jaiza.

La mentora se ha convertido en un referente para la joven, quien está viviendo en uno de los dos pisos de Málaga Acoge para chicas extuteladas en la capital: “María José es una alegría, ¡me encanta! Es buena y tiene algo que no tiene nadie. Cuando quedamos, hablamos mucho de mis cosas, me ayuda. La quiero mucho, ya que más que una amiga, es como una madre”, afirma Jaiza, quien no ha tenido a su madre cerca desde los catorce años: “Siento que me falta ese cariño, y ella me lo da”.

Para María José, acompañar a Jaiza le aporta mucho más de lo que ella le brinda a la joven. Además, la mentora la ayudó a prepararse una entrevista de trabajo, practicando juntas y reforzando su confianza.

Jaiza y María José caminan juntas hacia la inserción sociolaboral de la joven

Para la técnica Cristina, el mentoring es una herramienta muy positiva para jóvenes en riesgo de exclusión social que acuden al programa Incorpora Joven, pues les da la oportunidad de entablar una relación más familiar con un referente adulto que les acompañe en su proceso de inserción sociolaboral.

“Los técnicos Incorpora no dejamos de ser los profesionales en quienes se apoyan los jóvenes para organizar su vida ,pero quizá, si este apoyo se lo dan sus mentores dando un paseo, les llega más, como es el caso de Jaiza y María José. Es bonito ver todo lo que una relación así te hace avanzar en poco tiempo”, comenta Cristina para finalizar.

Jaiza y María José son un claro ejemplo de que esta actuación de mentoría social es una herramienta muy poderosa y útil dentro de los itinerarios de inserción sociolaboral de los jóvenes en riesgo de exclusión social que acuden a Incorpora Joven.

Se espera que Jaiza consiga un empleo con el que ser más independiente y que finalice con éxito sus estudios. De lo que no hay duda es de que María José estará junto a ella en todo el camino hasta conseguirlo