Participantes de Reincorpora del Centro Penitenciario de Castellón participan en un servicio a la comunidad sobre salud mental

Participantes de Reincorpora del Centro Penitenciario de Castellón participan en un servicio a la comunidad sobre salud mental

Un grupo de siete personas privadas de libertad del programa Reincorpora ha participado en varios talleres dedicados a la salud mental como parte de su itinerario de reinserción sociolaboral. La actividad ha sido organizada por Cáritas Diocesana Segorbe-Castellón, entidad Incorpora encargada de llevar a cabo el programa Reincorpora en el territorio, junto a los profesionales del Centro Penitenciario de Castellón, en el que se encuentran las personas participantes de este servicio a la comunidad.

El programa Reincorpora es una iniciativa impulsada por la Fundación ”la Caixa” en colaboración con el Ministerio de Interior que, a través de la entidad estatal Trabajo Penitenciario y Formación para el Empleo, desarrolla itinerarios personalizados de inserción sociolaboral con personas privadas de libertad.

Mejorar la calidad de vida de las personas con problemas de salud mental

Este servicio ha tenido como objetivo sensibilizar sobre la importancia de cuidar la salud mental a través de la adquisición de determinados hábitos saludables. Para ello, las personas privadas de libertad han desarrollado y dirigido diversos talleres destinados a las personas residentes del CEEM (Centro Específico para Personas con Enfermedad Mental) Santa Ana de Caixa Rural Vila-real que gestiona Fundación Manantial.

Durante el desarrollo de los talleres, las siete personas participantes del programa Reincorpora estuvieron acompañadas por profesionales de Fundación Manantial y del Centro Penitenciario de Castellón, quienes les dieron apoyo para llevar a cabo la actividad.

El primer taller consistió en la realización de ejercicios mentales y tuvo como finalidad poner de relieve la importancia de ejercitar la mente para mejorar la salud mental. Para ello, se realizaron juegos que ayudaron a estimular el pensamiento estratégico y la resolución de problemas.

En el segundo taller, en cambio, se llevaron a cabo juegos físicos en los que las personas con problemas de salud mental participantes pusieron a prueba su agilidad y destreza física, un aspecto sumamente importante para mantener un buen equilibrio mental.

Seguidamente, se realizó un taller musical, una actividad que puede mejorar el bienestar emocional y mental, y, por último, se realizó un taller de comida saludable en el que las personas residentes tuvieron la oportunidad de preparar y degustar un postre saludable a base de fruta de temporada, yogur y frutos secos.

Los servicios a la comunidad, un paso clave en el programa Reincorpora

Esta experiencia ha sido muy bien valorada tanto por el personal técnico y las personas residentes del CEEM donde se han desarrollado los talleres como por las personas privadas de libertad que han encontrado en este servicio a la comunidad una oportunidad para reforzar sus competencias personalesEstas, junto con las competencias laborales trabajadas en el programa Reincorpora, podrán sentar las bases de su futuro profesional.

Este tipo de iniciativas ponen de manifiesto la importancia de la colaboración entre entidades sociales para mejorar el bienestar de colectivos vulnerables, en este caso concreto, de las personas participantes del programa Reincorpora y las personas residentes del CEEM.

Por una parte, las personas con problemas de salud mental de la residencia disfrutaron de una mañana diferente y muy amena y reforzaron aspectos muy importantes para mejorar su calidad de vida.

Por otra parte, las personas participantes del programa Reincorpora tuvieron la oportunidad de poner en práctica los conocimientos adquiridos previamente en su itinerario de inserción social y laboral.

Además, todos ellos fueron conscientes de la importancia de ser solidarios con los demás. A partir de esta acción, incluso, una persona privada de libertad se ha ofrecido a cuidar de manera altruista el jardín de la residencia comunitaria cuando salga del centro penitenciario, mientras que otra ha decidido formarse como dinamizador de grupos al ver una posible salida laboral a raíz de este servicio a la comunidad.

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