La inserción laboral de Martha con el apoyo del programa Incorpora: “Este programa me ha cambiado la vida”

Martha Lucia Fonseca, usuaria del programa Incorpora y profesional del sector sociosanitario.

Después de varios años trabajando como cuidadora interna, Martha decidió que había llegado el momento de potenciar su perfil profesional. Fue esta firme determinación la que la llevó a ponerse en contacto con Cruz Roja Cantabria, entidad del programa Incorpora, desde donde le brindaron apoyo durante todo su proceso de inserción laboral.

Para ello, fue derivada al Punto de Formación Incorpora (PFI) de la Asociación Nueva Vida, donde comenzó su proceso de formación e inserción laboral. ¿Quieres saber cómo continúa su historia? Ella misma nos lo cuenta.

Los primeros pasos de Martha hacia su inserción laboral

Antes de acudir al programa Incorpora de Fundación ”la Caixa”, Martha trabajaba como cuidadora particular los fines de semana y, previamente, también había ejercido como profesional interna en varios domicilios.

Su precaria e inestable situación la impulsaron a querer mejorar su situación buscando una nueva oportunidad laboral a través de la formación: “Sentí la necesidad de mejorar mi situación laboral y profesional; por ello homologué mis estudios en España. Siempre he trabajado con contrato para acumular experiencia profesional en el sector sanitario”, cuenta.

Con este fin en mente y animada por una amiga, acudió a Cruz Roja Cantabria, donde recibió información relacionada con los cursos y los Puntos de Formación Incorpora impulsados a través de la entidad: “Ya conocía a los técnicos de la institución y, al contarles mi situación y preferencias, me derivaron al PFI de Incorpora, el cual iba a impartir un curso de atención sociosanitaria a personas en situación de dependencia”, comenta la usuaria.

La formación como punto clave para lograr la inserción laboral

En Cruz Roja Cantabria, Martha recibió un asesoramiento personalizado para afrontar esta nueva aventura laboral y formativa: “Los técnicos me orientaron constantemente actualizando mi curriculum vitae y proponiéndome cursos”, nos cuenta. “Como ya había realizado algunos de ellos, me derivaron al PFI de la Asociación Nueva Vida, donde hice la entrevista de selección para el curso de atención a personas mayores. A los pocos días, me informaron de que había sido seleccionada”, añade Martha emocionada.

Este curso fue su primer paso hacia la inserción laboral, y Marta afirma que fue maravilloso: “La relación con los compañeros fue fantástica, y nos enseñaron técnicas reales para aplicarlas directamente con los mayores”, cuenta.

Durante la formación, Martha realizó un total de 20 días de prácticas no laborales en la Fundación Asilo de Torrelavega, en los que pudo poner en práctica todos los conocimientos adquiridos durante el curso y aplicar en un entorno real de trabajo “tanto el uso del instrumental como el trato con los mayores”.

A lo largo de estas prácticas, nuestra protagonista contó con el respaldo del programa Incorpora y de los profesionales que trabajaban en la fundación: “En todo momento, estuvimos tutorizados por el personal de la institución”, confirma Martha.

Sobre su relación con los profesionales del equipo técnico, Martha nos cuenta que fue “excepcional”. Por último, la usuaria destaca la orientación complementaria que ha recibido por parte del programa para potenciar su perfil profesional: “Me proporcionaron asesoría psicológica para manejar el estrés, unas técnicas que han sido muy útiles en mi trabajo actual”, comenta.

Martha sobre el programa Incorpora: “Le doy un diez sobre diez”

Una vez terminó la formación, Martha consiguió un contrato de trabajo temporal en la Residencia La Alborada de Torrelavega, donde lleva trabajando cinco meses y ha podido aplicar todos los conocimientos adquiridos en el curso del PFI: “Durante este tiempo, me he dado cuenta de cuánto he aprendido y mejorado en el cuidado de personas mayores. Me siento mucho más preparada, y ha sido una gran inversión de mi tiempo”.

Cuando le preguntamos a la usuaria por su experiencia en el programa Incorpora, declara: “Le doy un diez sobre diez. Este programa me ha cambiado la vida. El curso te abre muchas puertas, ya que, durante la formación, te ponen en contacto con diversas instituciones sanitarias”.

Además, Martha también destaca cómo su nuevo puesto de trabajo le ha permitido conciliar su vida profesional y personal: “Tengo dos turnos de trabajo; una semana trabajo de mañana y la siguiente, de tarde, lo que me ha permitido mejorar la conciliación familiar, especialmente con mi hija de 17 años que está preparando la EBAU (Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad)”, narra la participante.

Gracias a todo esto, Martha mira su futuro profesional con esperanza y entusiasmo: “Esto no solo me ha permitido trabajar donde estoy actualmente, sino que también me dará la oportunidad de ofrecer mis servicios a otras instituciones del sector sociosanitario cuando termine mi contrato actual”.

Incorpora Cantabria, abriendo puertas a la inserción laboral de colectivos vulnerables

Martha nos cuenta lo satisfecha y motivada que está con su nuevo puesto de trabajo y cómo la formación que ha recibido la ha ayudado a mejorar sus competencias profesionales y personales: “Ahora soy una más; conozco bien a los residentes, sus necesidades y dolencias. Además, gracias a las habilidades adquiridas, puedo tratarles mejor y anticiparme a posibles problemas. Sé cómo manejar a los pacientes y me siento completamente integrada en la empresa”.

Al igual que Martha, hay miles de personas en riesgo de exclusión social en nuestro país que buscan una oportunidad profesional. Por ello, acciones como las del programa Incorpora, son imprescindibles para lograr la inserción laboral de todas ellas.

El Grupo Incorpora Cantabria ha logrado más de 4.907 inserciones laborales en este territorio durante los 15 años que lleva en marcha. Un dato positivo y esperanzador para lograr su principal objetivo: conseguir una sociedad más justa e igualitaria.